viernes, 11 de julio de 2008

El señor Mannil Laul explica la verdad de su pasado nazi


Harry Mannil Laul
Exagente de la policía política de Estonia en 1941
Entrevistado en una finca en San Rafael, Heredia,
Harry Mannil admitió que desde su puesto en la policía política de Estonia colaboró con la ocupación nazi. Alega que la población judía era un “problema” de los ocupantes y que no tiene nada de qué arrepentirse.
Edad: 87 años
Nacionalidad: Estonio - Venezolano
Ocupación: Empresario

En febrero del 2003, el director de Migración, Marco Badilla, le entregó una carta en la que le informaba que a partir de esa fecha no se autorizaría su ingreso a Costa Rica. ¿Es correcto?
Correcto.

¿Cómo ingresó si tenía ese impedimento?
Esa fue una decisión equivocada y luego fue cambiada, de modo que no existe ningún problema para que yo ingrese a Costa Rica.
¿Cuál fue su trabajo en la Segunda Guerra Mundial?
Creo que no vale la pena entrar en este tema. Durante la Segunda Guerra yo trabajé cuatro meses en la policía de seguridad del Estado de Estonia.
¿En qué consistía su trabajo?
El trabajo era la lucha contra el comunismo porque tras la salida de las tropas del Ejército Rojo, quedaron células de sabotaje y espionaje. Nuestro trabajo era encontrar esas células y llegar a fondo, porque ellos eran enemigos del pueblo estonio.
¿A quién le entregaban ustedes a estas personas? ¿Existía algún sistema jurídico?
Estonia estaba ocupada por Alemania, la autonomía dependía de la autoridad del ocupante, pero yo tenía 21 años. No podría hablar sobre la autonomía que existía.
¿Su trabajo incluía luchar contra la población judía?
Nuestro departamento no tenía nada que ver con los judíos, ese era un problema de los ocupantes. No puedo responder por lo que estaban haciendo los alemanes.
Pero usted vio lo que hacían, usted estaba ahí…
Yo no vi nada.
¿Los investigadores del Holocausto aseguran que, en esa época, la policía política estonia asesinó y torturó a unas 3.000 personas por sus convicciones políticas y por su raza?
El departamento de investigaciones recogía información, identificaba espías, era un trabajo de información para comprobar quiénes habían trabajado en beneficio de la ocupación soviética.
¿Cuál fue el destino de esas personas que usted identificó?
Después de 65 años no estoy en condiciones de saber. Nuestro trabajo era identificar y transmitir esa información a niveles superiores.
¿A quién reportaba usted?
Inicialmente, al señor Evald Mikson, pero solo trabajé con él dos meses.
Efraim Zuroff, director del Centro Wiesenthal, lo señala a usted como un criminal de guerra. ¿Cuál es su posición?
Es una total falsedad que ha sido constatada por autoridades de la República de Estonia. El fiscal que investigó mi caso dijo que las acusaciones en mi contra eran falsas.
El Centro Wiesenthal asegura que la fiscalía estonia no tuvo autonomía política para hacer una investigación rigurosa.
No creo que el Centro Wiesenthal tenga autoridad jurídica universal, creo que es una sociedad privada que ha hecho trabajo meritorio, pero lamentablemente cuando acusa a inocentes, como yo, pierde mucho de ese mérito.
Si es inocente, ¿por qué la oficina de investigaciones especiales del Departamento de Justicia de EE. UU. lo incluyó en una lista de observación y le negó la visa de entrada a EE. UU.?
Como usted sabe, el otorgamiento de visas es discrecional y simplemente ellos no quieren darme la visa. Yo no puedo preguntar por qué no quieren. “Yo tengo un documento del fiscal de Estonia diciendo que soy inocente. Un señor en Jerusalén puede hablar mucho, pero él no tiene jurisdicción aquí. Él puede decir mentiras, como en mi caso, y la comprobación es que las autoridades de Estonia cerraron la investigación porque no había nada qué investigar”.

¿Qué pasó con las personas que usted investigó? ¿Qué pasó con los judíos y los comunistas? ¿Los fusilaron?
Bueno, no soy yo quien debe contestar eso. Todo el mundo sabe lo que ocurrió y es muy lamentable y muy triste.
La policía en la que usted sirvió, ¿ colaboró directamente en eso?
No puedo contestar eso; policía es un concepto amplio, solo puedo decir que el departamento de investigaciones no se ocupaba de cosas de judíos.
No se ocupaba de los judíos, solo de los comunistas ¿A los comunistas sí los mataron?
No le puedo decir, yo no era un alto oficial. Durante la guerra a los espías se los condena a muerte, usualmente”.
¿Se consideraba como espías a todos los comunistas? ¿Cómo era eso?
¿Usted cree que es fácil reconstruir algo que pasó hace 65 años? Esa es mi respuesta.
¿Se arrepiente usted de haber ingresado a esa policía durante la ocupación nazi?
Yo solo hice mi trabajo como estonio.